“Hemos aprendido de los errores del partido para no repetirlos”
ENRIQUE PEÑA NIETO, CANDIDATO DEL PRI
Le han llamado busto
parlante, muñeco, niño bonito y ‘gelboy’, ataques que ha resistido
poniendo siempre la otra mejilla, para no perder los 20 puntos de
ventaja que lleva desde el inicio de la campaña. Casado en segundas
nupcias con una actriz de telenovela, Enrique Peña Nieto, se
afilió con 18 años al PRI, partido en el que ha sido todo y en tiempo
récord: pegacarteles, secretario, consejero y gobernador con 39 años.
Respaldado por turbios varones del PRI como Carlos Salinas, fue
gobernador del Estado México, el más poblado del país. Ahora, con 45
años, y al frente de un equipo de jóvenes tecnócratas como él, acaricia
la presidencia de México.
-Para muchos usted es sólo una cara bonita propuesta por la TV.Difiero. Tengo el respaldo de haber gobernado durante 6 años el Estado de México, el más poblado del país con 15 millones de habitantes, casi la población de Chile, y que genera uno de cada 10 pesos de la riqueza nacional. Como Gobernador de ese Estado, reduje la deuda estatal en más de 25% y se duplicaron los ingresos sin necesidad de incrementar impuestos.
-¿Cómo pondrá fin a las matanzas de los narcos? Los estados en manos del PRI son los más violentos.
No coincido con su apreciación. Partidizar la violencia y la criminalización en México denota falta de conocimiento sobre la verdadera situación del país. Mi prioridad será recuperar la paz y la libertad y para ello lanzaré una estrategia nacional para disminuir el número de asesinatos, secuestros, extorsiones y la trata de personas.
-¿Es posible un pacto con los cárteles? ¿Durante los antiguos gobiernos del PRI se pactaba?
El combate al crimen organizado es una obligación del Estado mexicano, no una decisión del partido en el poder. Ningún pacto es factible con quienes han enlutado nuestro país con más de 60 mil muertes. No es posible ahora y nunca lo fue en el pasado.
-¿Qué salva de la gestión del gobierno de Calderón?
Considero que el mejor juez de Calderón será el pueblo de México y de ello dará cuenta en las urnas este 1° de julio.
-¿Cómo valora al movimiento del #Yosoy132? ¿Fue el único candidato que no acudió al debate organizado por los universitarios?
Los jóvenes expresan un anh elo de mayor libertad y un reclamo por un mejor presente y mejores perspectivas de futuro. Existe un gran descontento ante las condiciones en que se encuentra el país. No acudí al debate ya que el movimiento asumió formalmente una posición política en contra de mi proyecto y de mi persona. Si bien respeto su opinión, no estaba garantizado el espacio de neutralidad que se requiere para un debate.
— Da la impresión de que el PRI ha hecho poca renovación interna. Los mismos nombres siguen ocupando los primeros puestos.
Dicha impresión es errada. Hoy por hoy el PRI, como cualquier otra organización política de su peso y edad, cuenta con cuadros jóvenes muy importantes. Si bien estamos orgullosos de los logros de nuestro partido durante el siglo XX, estamos conscientes de sus errores y abusos. Sin duda hemos aprendido de ellos para no repetirlos. La nueva generación de priistas a la que pertenezco quiere un México democrático.
-¿Qué queda del viejo PRI, autoritario y corrupto?
Considero que no tienen una percepción precisa de la evolución que ha emprendido el partido a lo largo de los últimos doce años ni de las transformaciones que México ha vivido como país y como sociedad ni de los avances que las diferentes instituciones; cambios todos que nos han encaminado hacia un presente democrático y plural. Como señalé, el PRI, a lo largo y ancho del país, compite de manera permanente en elecciones reñidas y vigiladas, acepta derrotas, reconoce triunfos y gobierna en un contexto democrático.
-¿Qué papel debe jugar México en el contexto internacional?
Una de las grandes metas de mi gobierno será reposicionar a México como potencia emergente. México debe recuperar su prestigio y liderazgo internacional acorde a su peso.
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