Diario "La Nación". Buenos Aires, Sábado 19 de mayo de 2012
Un foro que pierde su influencia
WASHINGTON
(EFE).- La influencia del G-8, el club de los países ricos creado tras
la crisis del petróleo de 1973, se encuentra cada vez más mitigada por
la consolidación del G-20, el foro que reúne a las potencias emergentes
con las economías industrializadas.
La cumbre número 38 del G-8,
que se celebra desde ayer en Camp David, sentará en una misma mesa a
Estados Unidos, Japón, Alemania, Francia, Gran Bretaña, Italia, Canadá y
Rusia para poner en común soluciones a la preocupante crisis en la
eurozona. Pero no se esperan acuerdos importantes, más allá de críticas a
países como Irán, Siria, Sudán o Corea del Norte, ya que en asuntos
económicos el G-20, establecido en 2008, se ha convertido en el foro de
referencia para coordinar iniciativas económicas.La primera cumbre del grupo de potencias industrializadas en 1974 estuvo alentada por una crisis que ahora parece menor ante los graves problemas en los países del euro, que se suma a los temores que despiertan grandes economías con ingentes deudas públicas como Estados Unidos o Japón.
Ahora, el foro de encuentro de los países ricos no tiene la capacidad de antes para echar mano de manera aislada de políticas monetarias u otros instrumentos coordinados para poner fin a la crisis..
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