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lunes, 24 de agosto de 2015

CHINA 2015. China cambió y se siente en la desaceleración del comercio

Ieco. Diario "Clarín". Buenos Aires, 23 de agosto de 2015.

China cambió y se siente en la desaceleración del comercio

ROBERTO AZEVEDO
El gigante asiático "ya no tracciona como antes", sus importaciones han caído un 15% en un año, dice el director general de la OMC. Esto explica gran parte del colapso de las materias primas, que aún están 20 a 30% más caras que a fines de los 90.
Hasta 2017 con las riendas de la Organización Mundial de Comercio (OMC) , el brasileño Roberto Azevedo, dice que su principal logro desde que asumió en 2013 fue haber retomado el brazo negociador. Sin embargo, admite un camino plagado de obstáculos. "Creo que las negociaciones son muy difíciles. Vimos en el pasado reciente un avance muy grande en términos de diálogo. Pero, aunque tengamos esa mayor densidad de diálogo, las diferencias aún son muy grandes. Los desafíos son enormes. Estamos buscando cómo superar esas dificultades", señaló de cara a una nueva cumbre ministerial global que tiene cita en diciembre en Nairobi.

En momentos en que el precio del crudo se acerca peligrosamente a los US$40 el barril y el resto de las materias primas lo acompañan en su descenso, Azevedo comenta que esa baja no solo esta relacionada con las nuevas tecnologías, como en el caso del petróleo, sino con el nuevo modelo económico de China, cuyas importaciones han caído 15% en lo que va del año y que impacta en una disminución del ritmo de crecimiento del comercio mundial, que bajó del 5% al 3,3% este año.

Este ingeniero industrial participó en Salzburgo de un panel sobre las desigualdades. Y dijo: “El principal problema de la humanidad es la ciudadanía que está en los márgenes, son 1.000 millones de personas que viven con menos de un dólar por día”.

–¿Cuál debería ser la respuesta? Muchas de esas personas golpean hoy la puerta de Europa, se le preguntó.
–Vengo de una familia de inmigrantes que se mudó del norte de Brasil a Brasilia en busca de oportunidades. No se puede ver el problema sin la perspectiva de la economía y de las herramientas para generar oportunidades en sus países. El desarrollo del área rural es clave para evitar también la superpoblación en las ciudades. Debe verse desde la perspectiva de la globalización. Todo el sistema productivo está basado en la globalización, ya no hay manufacturas en un solo país. Y el desafío es cómo se puede beneficiar un país de las oportunidades y cómo se hace para que la economía mundial crezca de manera armónica.

–¿Dónde ve esas oportunidades?
–Hoy se necesita ser parte del sistema y si el ambiente es previsible, hay inversión y hay comercio. En Africa sólo el 5% del comercio es entre los propios países del continente. Hay casos como Vietman que en 20 años duplicó su PBI y redujo la pobreza extrema del 60% de la población al 5%.

–¿Qué está previendo en el precio de las materias primas?
–Hay un factor tecnológico, como es el caso del petróleo no convencional que ayudó a que bajara el precio del crudo, y un factor de oferta y demanda. Hoy los países desarrollados tienen economías más débiles. China ya no tracciona como antes, sus importaciones cayeron 15% en un año y eso se ve en los precios de los commodities.

–¿Durará mucho tiempo?
–Las materias primas aún tienen un nivel razonable, están 20 a 30% más altas que a fines de los 90. El gran tema es China, que ha cambiado su modelo económico y lo está orientando hacia el mercado interno, en vez dela exportación. Eso ha generado una baja de demanda mundial. China tiene un enorme impacto, también Europa, que es el 33% de la economía global.

–¿Cómo impacta en los niveles de comercio?
–El crecimiento del comercio mundial será este año de 3,3% y 4% en 2016. Es bajo respecto al 5% al que nos habíamos acostumbrado.

–Argentina, por un fallo de la OMC, debe dejar de utilizar a fin de año las DJAI, que eran indispensables para importar. ¿Las puede reemplazar por otro instrumento?
–Es un fallo de la OMC, habrá un proceso de apelaciones seguramente por parte del Gobierno. Y como director general de la OMC, no puedo opinar al respecto.

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