Comparación
El juego de las diferencias
Segre responde: "Son muchas y continúan siendo favorables para Brasil. Quien piensa en invertir en la Argentina sabe que no podrá conseguir financiación internacional (en Brasil sí); no podrá enviar sus lucros al país de origen (en Brasil sí); no podrá importar insumos o productos que pueda necesitar para complementar la producción si no es con la autorización subjetiva de la Secretaría de Comercio (en Brasil tiene libertad para importar lo que quiera); no tendrá libertad de aumentar los precios si lo estima necesario (en Brasil, sí. Perderá mercado si sale del precio de su competidor); no tendrá libertad para manejar su negocio con el riesgo de que el Gobierno se meta en la cadena de producción, -favoreciendo o complicando el negocio- (en Brasil la libertad de mercado hasta el momento es absoluta); no tiene un programa de promoción industrial (beneficios fiscales, de financiación por medio de bancos de desarrollo, otorgamiento de terrenos, etc. En Brasil tiene todo eso y más)".
Barral agrega: "Muchos de los reclamos en Brasil se ven también en la Argentina: pago mis impuestos y no recibo salud ni educación. Pero mientras ustedes tienen un problema político, el nuestro es institucional".
Barral señala que en su país hay "inmovilidad jurídica, no inseguridad jurídica. Alrededor del 80% de las obras planificadas -aún con presupuesto otorgado- no se hizo. El Tribunal de Cuentas paró obras, el Banco Central no las ejecutó. El problema son los tiempos para implementar los proyectos, pero acá nadie habla de revocar concesiones"..
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