Diario "La Nación". Buenos Aires, 25 de setiembre de 2008.
Romance real
Alberto de Mónaco se casa con una ex nadadora
Así lo informaron medios de prensa
PARIS.- El príncipe Alberto II de Mónaco, de 50 años, y la nadadora
olímpica sudafricana Charlene Wittstock, de 30, han decidido contraer
matrimonio, tras un noviazgo oficioso que se hizo público en los Juegos
Olímpicos de invierno del 2006 y que posiblemente se anuncie en forma
oficial este otoño boreal.
La pareja ha aparecido junta en la Costa Azul y el príncipe ha
compartido con Wittstock varios viajes oficiales. También se los vio en
los recientes Juegos Olímpicos de Pekín. El matrimonio debería
consumarse entre marzo y agosto de 2009. El Palacio Real monegasco no
desmintió las afirmaciones de los diarios Bild am Sonntag, Gala y Le Parisien , que informaron sobre el "inminente" anuncio del noviazgo oficial.
Las imágenes de Charlene Wittstock, también ex modelo de Sports Illustrated , irrumpiendo como una estrella en el último baile de la Cruz Roja, con un majestuoso modelo malva de Terrence Bray, su modisto preferido, instalado en Durban, escoltada en muy segundo plano por las princesas Caroline y Stephanie, voluntariamente eclipsadas, ya proclamaban silenciosamente su nueva posición estelar en el palacio de la familia Grimaldi, tras haber conquistado el corazón de Alberto II.
En aquella oportunidad Wittstock, una nadadora olímpica muy bella, lució una figura privilegiada.
Con la muerte de su padre, Alberto II asumió el poder total en el principado. Por su parte, con prudencia y discreción, la figura pública de Charlene Wittstock comenzó a sufrir una metamorfosis que la llevó, tal como se vio en el último baile de la Cruz Roja, de ex deportista de elite (participó en los Juegos Olímpicos de 2000 en Sydney) a una "dama de mundo" que luce los modelos de la más alta costura. Aquellas imágenes anunciaban que había nacido una nueva estrella en la bóveda celeste de la nueva geografía del lujo y los placeres, en el corazón de la Costa Azul.
La boda se realizará probablemente en el la Catedral de Mónaco, donde están enterrados Grace de Monaco y Rainiero, entre otros ancestros del príncipe. La boda legendaria de Grace y Rainiero, en 1956, abrió una nueva página en la historia de Mónaco, el viejo reino encantado fundado por los Grimaldi hace más de trescientos años. .
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