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jueves, 6 de agosto de 2015

BRASIL 2012 Los jugosos negocios militares, en la mira

Los jugosos negocios militares, en la mira

Intentan potenciar la industria de defensa
RIO DE JANEIRO (De nuestro corresponsal).- Un elemento clave del nuevo impulso que está dando Brasil a sus fuerzas armadas es la reactivación de su propia industria militar.
"Brasil hoy no está saliendo al mercado de productos de defensa como un comprador más; está buscando oportunidades para desarrollar tecnología militar en conjunto con otros países", subrayó a LA NACION el jefe del Estado Mayor Conjunto brasileño, general José Carlos de Nardi.
En sus jugosos negocios militares, Brasil insiste en que como parte del trato haya cierta transferencia de tecnología y/o en que los productos sean fabricados en territorio brasileño.
Así ha establecido acuerdos estratégicos con Francia para la construcción de submarinos convencionales y para la fabricación de componentes para su propio primer submarino a propulsión nuclear; con Israel para el desarrollo de un modelo autóctono de un vehículo aéreo no tripulado (VANT); y está fabricando 50 helicópteros en sociedad entre Eurocopter y Helibrás.
En parte, la renuencia a la transferencia de tecnología ha sido lo que ha demorado el cierre de la compra de 36 nuevos aviones caza, contrato valuado entre 6000 y 8000 millones de dólares, por el que compiten Estados Unidos, Francia y Suecia.

Con la Argentina

Con la Argentina, en tanto, Brasil está desarrollando los vehículos anfibios Guaraní, además del proyecto del super carguero aéreo KC 390, en el que también participa Chile.
"Buscamos una fuerte cooperación militar con nuestros vecinos de América del Sur, en especial con la Argentina. América del Sur es una región rica en recursos, agua, alimentos, petróleo. En términos de disuasión, creemos que debemos actuar de América del Sur hacia fuera", opinó De Nardi.
Con las rivalidades militares en América del Sur como parte del pasado, en una reciente visita a Santiago de Chile, el ministro de Defensa de Brasil, Celso Amorim, destacó que el fortalecimiento de la industria y la tecnología de defensa regional es una manera de crear confianza mutua. "La complementariedad no es el único beneficio, se trata de construir y profundizar confianza, renovar mentalidades", dijo.
En tanto, el Ministerio de Defensa brasileño se encuentra en conversaciones con Ucrania para la fabricación de cohetes y satélites, mientras que la empresa ucraniana Antonov está interesada en construir aviones para Brasil.
Hoy, la industria militar brasileña emplea a unas 25.000 personas directamente y a más de 100.000 de manera indirecta, pero se espera que en los próximos diez años esas cifras se dupliquen. La idea del gobierno es transformar la zona suburbana a la ciudad de San Pablo en el centro neurálgico de su nueva industria de defensa.
En el plan general de renovación de las fuerzas armadas se estima que se invertirán entre 30.000 y 35.000 millones de dólares en los próximos diez años..

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